lunes, 11 de septiembre de 2017

Y fin 11/09/2017

Apocalipsis 22:19: "Y a quien quite algo de las palabras de este libro profético, Dios le quitará su parte del árbol de la vida, y de la santa ciudad y de lo que está descrito en este libro."

Siempre he sido un niño muy fantasioso, con mucha imaginación, quizás, demasiada imaginación. Y eso me hacía añadir cosas a las historias, para enriquecerlas, como el protagonista de la película Big fish, ya conté alguna vez que me gustaba añadir estos detalles a mis historias. Pero hay un problema con esto, y es que las historias pueden quedar interesantes o incluso hermosas pero pierden el detalle más importante, dejan de ser verdad. Y aunque algo pueda ser hermoso, si no es de verdad no tiene valor, además, cuando la gente se da cuenta de que tu historia no es verdad, pierden absolutamente la confianza y el interés en ti, aunque gran parte de la historia fuera verdad ya nada lo es, ya todo es mentira y tu credibilidad queda por los suelos. Tu buena intención al adornar la historia, no sirve más que para deshonrarte.

Pero a veces hacemos mucho eso de "adornar" las historias. Nos gusta adornar no sólo las historias sino también otras cosas, estadísticas, noticias, libros que hemos leído, películas que hemos visto e incluso biografías de gente que admiramos. A veces las adornamos sin darnos cuenta, por pura exageración, con el fin de que quien nos escucha se sienta aún más metido o intrigado por la historia, o que le apetezca más ver de qué va. El problema es que, como antes, una historia con añadidos deja de ser verdad y pasa al terreno de la patraña. Pierde toda su credibilidad, como las instrucciones para encontrar un tesoro que hayan sido confundidas con una única señal errónea, serán erróneas todas ellas a pesar de que el resto de las instrucciones puedan estar bien, porque una sola instrucción falsa emborrona todo el resultado final, destruye el resultado final.

"Todo tiene su final, nada dura para siempre", así decía una vieja canción de salsa, y claro, tenían razón a medias. Razón a medias porque nosotros sabemos que el Reino de Dios y su amor no tienen final. Pero hoy es el final de este blog, de este proyecto, de este devocional. Atrás queda un año de trabajo complemente fatigoso pero enriquecedor y dónde he tenido que estudiar y aprender bien la Biblia, escudriñar la palabra de Dios. Pero estaba ahora, ya de noche, pensando en que pasaría si yo hubiera añadido en mis devocionales algo de mí, si hubiera usado la palabra para mí provecho estaríamos hablando de un grave pecado de graves consecuencias. Hoy le pido a Dios que tome mi devocional en ofrenda, y que si algo añadí me lo perdone en el nombre de Jesús, pues nada puede añadirse a su palabra. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

domingo, 10 de septiembre de 2017

En la casa de Papá 10/09/2017

Jeremías 17:8: "Ese hombre es como un árbol plantado junto a los arroyos; echa sus raíces junto a las corrientes, y no se da cuenta de cuándo llega el calor; sus hojas siempre están verdes, y en los años de sequía no se marchita ni deja de dar fruto.»"

Soy de ese tipo de persona que cree que cada niño y cada niña son un maravilloso proyecto de futuro. Un maravilloso proyecto del que me resulta curioso, interesante y fascinante formar parte. Ahora bien, he descubierto algo, durante todos estos años he visto como hay factores que influyen en la crianza de un niño, pero ninguno tan gravemente, en ambos sentidos positivo y negativo, como la relación con los padres. Una relación con los padres buena lleva a un desarrollo correcto y libre de la personalidad, al establecimiento de normas que favorecen el buen comportamiento y el amor, y conlleva seguridad en el crecimiento y el pensamiento de esos niños. En cambio una mala relación o la ausencia de relación hacen que un niño se desarrolle cojo, triste, vacío e inseguro, incapaces de asumir relaciones humanas sanas entre iguales.

Y hay una estadística horrible y detestable que pone en tela de juicio algo de lo que muchos psicólogos se están haciendo eco desde hace algunas décadas. Y es que, en la sociedad actual, hemos obviado la importancia de los padres, especialmente del padre. Primero porque los padres y madres trabajan muchas más horas fuera de las que solían, pero además, paradójicamente hay una corriente feminista actual que rechaza la importancia de la figura paterna, y a los padres, o se les está invitando, o muchas veces, no se les está dejando ser padres. Y las consecuencias están siendo devastadoras. En primer lugar, porque hay una generación ya de hombres que no saben ser hombres, y de mujeres que no saben si son o no dignas de ser amadas y conquistadas por un hombre. Y eso, en segundo lugar, crea una gran cantidad de discapacitados emocionales.

Sin embargo, la separación de un papá o de una mamá no es, ni con mucho, tan grave como la separación del Papá de todos nosotros, de nuestro Señor Dios. Porque la separación de Dios produce el pecado y el pecado, produce la muerte. Así que da igual si uno cree o no, porque como dice la Biblia, los demonios también creen... Lo que Dios quiere de nosotros es cercanía, porque la cercanía produce amor, el amor produce obediencia y la obediencia santidad. Y esto es un círculo porque la santidad produce más cercanía con Dios. Cómo es propicio que nos criáramos en casa de papá y mamá, es mucho más propicio que habitemos bajo la mano de Papá, y nos enraicemos en sus arroyos, que habitemos en la casa de Papá, es el único modo de tener vida y de que sea una vida plena. Acércate a Papá, el lleva mucho tiempo esperándote, y tú lo necesitas. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

viernes, 8 de septiembre de 2017

A la feria 09/09/2017

Isaías 22:13: "pero ustedes prefirieron gozar y divertirse, matar vacas y degollar ovejas, comer carne y beber vino. Y decían: «Comamos y bebamos, que mañana moriremos.»"

Yo me he criado en Andalucía, una región de España con muchas particularidades, y desde el principio de abril hasta el final de septiembre o incluso octubre en nuestra geografía se suceden las ferias, que a veces van ligadas a las antiguas ferias de ganado, a las fiestas de la cosecha y la vendimia u otras efemérides del estilo. Recuerdo que me gustaban mucho cuando era adolescente, especialmente la de mi pueblo, porque en la feria de tu propio pueblo es como que te entra una euforia especial, las amistades se magnifican y emborrachan de alcohol barato y la gente gasta lo que no tiene. Recuerdo que mi sentimiento era llegar al final de la feria sin haberme quedado sin dinero para el último día, quería tener dinero para todos los días. Lo curioso es que vivía como si el lunes no fuera a llegar, pero cuando llegaba me pasaba un mes sin dinero por mi derroche de feria.

Pero esto es un tipo de comportamiento más habitual de lo que pudiera pensarse, es la mentalidad del que como piensa que la vida y algunos de sus periodos se acaban, ese final no significa nuevos comienzos. Y vivimos felices de que ese final llega pronto, derrochando sin medir que en el nuevo comienzo puede ser que necesitemos algunos recursos, y vemos como siempre nos coge por sorpresa la cuesta de enero o el inicio del cole, es un hecho que estos dos momentos del año son difíciles para muchos de nosotros por una mala planificación de las etapas anteriores, la Navidad y el verano, que nos hacen derrochar y tener luego que estrujar nuestras mentes para poder arreglar esa falta de planificación. Porque la vida suele continuar siempre, nos guste o no, y pensar en lo que vendrá después es un modo muy responsable de actuar.

Y a un cristiano no le vale esa filosofía de vivir al límite hasta el fin de tus días porque creemos que nuestros días no tendrán fin. Esa es la verdad, no tenemos la necesidad de vivir como si lo de aquí se fuera a gastar porque lo que está por venir es mucho mejor, y no tengo ni la más mínima duda al respecto. Por eso soy muy crítico cuando en la Iglesia escucho esos paradigmas humanistas de "ámate mucho, porque nadie más lo hará", o "vive como si fuera tu último día" o "lo que no hagas hoy ya nunca podrás hacerlo", porque no solamente no son bíblicos, que no lo son, sino que además son mentiras. Nosotros no diremos esas cosas, ni nos dejaremos cambiar por paradigmas humanos, nosotros diremos "ayunaremos y oraremos, porque mañana viviremos", por la gracia de Dios. Hermano ¿Y si vivimos como si la eternidad ya fuera real en nuestras vidas? Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

jueves, 7 de septiembre de 2017

El terco 08/09/2017

Proverbios 18:12: "El orgullo humano es presagio del fracaso; la humildad es preludio de la gloria."

Recuerdo, de mis primeros años de entrenador ser un chico orgulloso, pero luego fui madurando a la sombra de alguno de mis profesores y me convertí en alguien que escuchaba más y hablaba menos. Recuerdo entonces haber visto en otros chicos lo que yo era entonces, un terco de libro. Hubo un chico que destacó en esto sobre los demás, yo le vi un día jugando y empezamos a hablar, pero a pesar de que apenas tenía diez u once años, se negó siempre a que le corrigiera, él decía que ya sabía y que no necesitaba que nadie le "mandara". Nunca pude comprender el origen de tan grande orgullo, porque además le perdí la pista a aquel chico, pero fue el único chico al que no pude enseñarle nada, porque los canales de comunicación los tenía bloqueados por el orgullo, y desde luego, como jugador de baloncesto nunca llegó demasiado lejos.

Pero esto no es exclusivo de chicos marginales lanzando en una cancha solitaria, las personas somos en gran medida orgullosas, prueba de ello es cuando queremos aprender algo pero no queremos que alguien lo haga y nos muestre, sólo que nos digan como hacerlo, así son mis padres cuando necesitan que les expliques algo del ordenador, dicen que les digas cómo hacerlo, pero su orgullo les impide que te coloques en la posición de profesor, porque sería admitir con nuestros actos nuestra falta de autosuficiencia, nuestra incapacidad de manejar los parámetros de nuestra necesidad. El orgullo es un enemigo muy sutil, te hace sentir confortable para que no salgas de ese confort, pero por eso mismo te evita vivir y aprender de las mejores cosas de la vida, cierra los canales de comunicación y aprendizaje.

Por eso es una constante prevención en toda la palabra de Dios, la lucha contra el orgullo, porque te puede evitar entender tu propio pecado, tu necesidad de crecimiento como cristiano o incluso tu santidad. Aún así Dios tiene previstas curas para el orgullo, Él sabe que una cura de humildad mata al orgullo, que una situación que no somos capaces de afrontar nos hace darnos cuenta de lo pequeñitos que somos. Sólo cuando asumimos que somos pequeños, frágiles y débiles se nos cae esa imagen confortable, y vemos la necesidad de escuchar al maestro, de cerrar la boca y escuchar la palabra de Dios, porque tenemos la condición real de necesitarla. El orgulloso no se convierte hermano, por eso no llega lejos, sólo el humilde obtiene la victoria que es en Jesús, por toda la eternidad. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

miércoles, 6 de septiembre de 2017

De doble moral 07/09/2017

2 Samuel 12:5: "David se puso muy furioso contra aquel hombre, y le dijo a Natán: «Juro por el Señor que ese hombre merece la muerte."

Los niños y las niñas son geniales, me encanta trabajar con niños porque aprendo muchísimo de ellos, más de la vida incluso que de la profesión. Hace algunos meses reflexionaba acerca del doble rasero moral que todos parecemos tener, y me di cuenta que esto es mucho más fácil de verlo entre niños pequeños, que esto empieza cuando somos muy niños. Si ves a niños de 5 a 6 años, cuando alguien les hace algo parecido a lo que ellos hacen, se lo toman mucho peor que con lo que ellos mismos han hecho. Para ellos es mucho más grave lo que hace cualquier otro niños alrededor que lo que hacen ellos. Un niño es incapaz de ver la gravedad de sus propios actos porque carece de empatía, y por lo tanto, las consecuencias en sus actos para otros no pueden ser tan dolorosas como lo son las de los actos de otros para él.

Y aunque nuestra empatía crece conforme nos hacemos mayores, es muchas veces una empatía teórica más que práctica, porque aunque tenemos la consciencia de que los demás sufren por nuestros actos, no parece que le pongamos mucho remedio o nos preocupe lo más mínimo. Un ejemplo claro es que la mayoría de nosotros criticamos a los políticos por corruptos cuando los datos arrojan que dos de cada tres españoles cometen algún tipo de corrupción en sus relaciones con el estado, y las cantidades no son relevantes, es mucho más relevante que hayamos olvidado que esas cosas están mal, simplemente mal aunque las hagamos nosotros, y alguien que hace cosas que están mal no es más que una mala persona, una persona digna de castigo.

Y esto parece ser el peor error de memoria que tenemos los seres humanos, que hemos olvidado lo pervertido que está nuestro corazón, lo perversos que somos. David había olvidado el mal cometido contra Urías simplemente porque había desaparecido quien le pudiera acusar de su mal, que por otra parte era de dominio público. La mayor victoria del enemigo no es sólo que nos hayamos olvidado de él, porque los cristianos no lo hemos hecho, su mayor victoria parece ser que el hombre haya olvidado que es pecador y que necesita su perdón diario, incluso entre los cristianos muchos lo hemos olvidado. Sin ese concepto en nuestro corazón no vamos a poder entender el amor de Dios, la gracia, la redención y toda la gesta de la Cruz de Cristo, sin nuestro convencimiento de pecado no hay arrepentimiento y no hay hombre nuevo, no hay nada. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

martes, 5 de septiembre de 2017

A muerte 06/09/2017

Josué 6:18: "Y ustedes, tengan cuidado de no caer bajo condenación. No toquen ni tomen nada de lo que está bajo maldición, para que el campamento de Israel no sea destruido y perturbado."

No sé si alguno de mis lectores habrá tenido ganado, pero en mi infancia y adolescencia, mi padre decidió alquilar un local y hacer un corral donde tuvimos, durante algo más de una década, gallinas cerdos, patos y hasta corderos para consumo familiar. Uno de las mayores enemigas de un corral es la rata, la rata se come los huevos, trae enfermedades, muerde y se pelea con las gallinas y a veces te enferma un animal. Y cuando una familia de ratas llega, la lucha que se desata no admite clemencia, o las matas a todas, o seguirán atacando la estructura, royendo el hormigón como si fuera una loncha de queso y atacando a los animales, porque además, la rata es un animal muy kamikaze. Así que, cuando mi padre veía restos de la presencia de ratas en el corral, íbamos a la tienda de fitosanitarios a por trampasy veneno, e incluso a veces, debíamos pasar la noche con la escopeta de balines para matar al bicho.

A mí esto me recuerda a los invasores bárbaros de la antigüedad, que daba igual que tú los rechazaras una y otra vez, debían perseguirlos y matarlos a todos porque si no, ellos volvían. Hay enemigos entre los que no valía la piedad, ni siquiera podías hacerlos esclavos, tan sólo te podía servir la política de tierra quemada contra ellos, porque para ellos la rendición y la huida eran la única derrota. Y ante esta circunstancia, algunos aprendieron que sólo era posible luchar por la destrucción de ese enemigo, los romanos quemaron Cartago hasta los cimientos porque sino, en cien años de hubiera vuelto a levantar contra ellos, y esto es algo que en la antigüedad tenían interiorizado, los mismos persas y babilonios cuando conquistan Israel terminaron destruyendo hasta el primer templo, y los romanos el segundo, porque sabían que si había algo que podía levantarse, se levantaría.

Y Dios le manda a su pueblo, en la conquista de la tierra prometida, que no dejen a ningún pueblo con vida, y existe una explicación en lo natural, pero en lo espiritual existe una enseñanza mucho mayor. Y es que en esta conquista existe una gran metáfora de cómo el hombre nuevo conquista la carne y obtiene el Reino de Dios, y cada pueblo que hay que conquistar es un pecado al cual hemos y podemos seguir estando atado. Y la política de lucha contra ese pecado no puede ser la de tener misericordia, la de apiadarnos de él, sino la de tierra quemada, y si por un pecado he de romper con un amigo, más me vale estar sin amigos en el Reino que quemarme rodeado de ellos. Hermano, si es tiempo de que reanudes tu lucha recuerda, vas a muerte, sin cuartel, hasta destruir a tu enemigo. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

lunes, 4 de septiembre de 2017

Todo menos lo básico 05/09/2017

1 Corintios 13:1: "Si yo hablara lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal resonante, o címbalo retumbante."

Este año ha hecho veintidós temporadas que estoy en el mundo del baloncesto. En ese tiempo, he podido observar muchos jugadores, tanto en el ámbito profesional como en el amateur. Y a veces veo a ese tipo de jugador que tiene todo lo que se requiere para ser genial, a primera vista tiene el físico, la visión, la disciplina y el talento... Pero carece de algo básico y fundamental, que es el amor por el juego, el amor por jugar, por ganar y por ser el mejor. Y recuerdo que cuando Pau Gasol ya estaba en su esplendor, vinieron una generación de jóvenes por toda Europa con esta característica, eran grandes proyectos de jugador pero carecían de ese amor, carecían de ese espíritu competitivo que marca a los que son geniales. Yo tuve un amigo así, que hoy en día es contable, un contable de 1'95 y campeón de España, pero contable.

Decía Justin Hoffman, que fueras actor, únicamente si no podías pensar en ser otra cosa en el mundo, si te daba igual serlo en Hollywood que en el escenario de un teatro comunitario, entonces eras un actor. Igualmente uno puede tener una cara bonita y dotes para la actuación, pero si no ama actuar va a ser de ese tipo de actores zafios que tan pronto vemos en la pantalla como al momento siguiente los hemos olvidado. En una familia lo que hace que todo se mantenga unido también es el amor, si en una familia la gente se moviera por la obligación o por el respeto que tiene por sus miembros, al primer problema cada cual se iría para un lado y la familia se disgregaría, de hecho, pasa en muchas familias actualmente dónde el motor ha dejado de ser el amor. Porque todo lo que se hace sin amor se hará hasta el momento en que surja cualquier contrariedad o dolor.

Por eso me parece curioso como muchos cristianos olvidamos que lo que debe mediar entre todos los aspectos de la vida del creyente es el amor, no ese amor buenista que algunos dicen, pero amor al fin y al cabo, nos falta amor a pesar de que la Biblia dice que Dios es amor. Y quizás es esto lo que la gran mayoría de no creyentes e indecisos del mundo están esperando ver en nosotros, quizás sea esto lo que todos están buscando. Porque si hablamos, o escuchamos la información que la gente y la propia cultura nos da, la gente está buscando amor verdadero, y no hay otro amor verdadero que no sea Jesús. Porque además, si lo que hacemos lo hacemos por amor, no dejaremos de hacerlo cuando los impedimentos lleguen, lo haremos aunque sea en el teatro comunitario, lo haremos en la calle, atacados y escupidos, porque así es el amor. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

domingo, 3 de septiembre de 2017

La solución milagrosa 04/09/2017

Levítico 19:31: "»No recurran a los encantadores ni a los adivinos. No los consulten ni se contaminen con ellos. Yo soy el Señor su Dios."

¿Saben una de las cosas que aprendí cuando entrenaba a gente? Que las cosas rápidas no funcionan. Una de las veces más estrambóticas que tuve que afrontar fue cuando una novia, que iba a casarse en dos meses, me pidió que le ayudara a perder treinta kilos antes de su boda. Dejadme que os explique que, para que resulte sano y efectivo y pueda tener una progresión real a la vez que realista, nuestro objetivo no debía superar el kilo y medio por semana, eso nos permitía bajar unos doce kilos, nada más, si queríamos hacer algo más, teníamos que poner su salud en riesgo y aún así no sabíamos si lo conseguiríamos. Las primeras dos semanas el trabajo no estaba yendo del todo mal, y con mucho esfuerzo conseguimos que perdiera cuatro kilos. Como no iba lo rápido que queríamos aumenté el ritmo, y a la tercera semana se partió el bíceps femoral, un músculo, con lo cual fue al altar gordita y cojeando.

Porque yo no estaba en aquel momento en disposición de hacer ningún milagro, porque no sé hacer milagros, sé hacer algunas cosas pero los milagros aún no están en mi lista, a veces con algo de ayuda de Dios consigo hacer algo increíble, pero aquella no fue una vez de esas. Y esto es lo que nos pasa por ser unos seres tan fugaces, nuestra mente ha sido educada en querer las cosas lo más rápido posible a pesar de que somos los seres humanos que más viven de toda la historia de la humanidad. Y por eso nos enfadamos en un restaurante si la comida se demora veinte minutos, o si tenemos que esperar una cola, nos mata esperar una cola. Lo que muchas veces no entendemos es que la buena comida tiene que cocinarse, y que, como eso, las mejores cosas de la vida tienen su tiempo de cocción, pero a la vez su duración es mucho más larga, intensa y buena.

A veces entro en Facebook y me sorprende que cantidad de contactos míos siguen a páginas de tarot o de autoayuda, cuantos siguen la típica página de preceptos kármicos, o budistas que te dan, supuestamente el camino rápido para llenar los vacíos de tu existencia ¿Pero que es lo que ocurre? Que la mayoría de la gente al poco de verse satisfecho por una de estas dietas rápidas, se dan cuenta del efecto rebote, y es que si se llenaron un poco los huecos, al pasar el tiempo vuelven a estar vacíos, y cada vez más vacíos. La única manera de uno hacer la buena dieta es no buscar el camino rápido, es ir a buscar al Jesús de la Biblia y vivir la vida de los tiempos de Dios, que generalmente cocinan las cosas a fuego lento, que no proviene de una revistilla de divulgación, sino que lleva toda la historia funcionando, hermano, no confíes en dietas milagro. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

Huérfanos 03/09/2017

Zacarías 11:4: "Así me dijo el Señor mi Dios: «Cuida de las ovejas que van al matadero,"

Los huérfanos no son solamente aquellos niños que no tienen madre o padre, para mí, como entrenador y educador, los huérfanos son todos niño que vive desamparado y desauciado por la sociedad, incluso por las instituciones. Yo pensaba que había conocido a alguno de estos en mis años, hijos de la droga y el alcohol, hijos de la pobreza... Pero jamás podría haber imaginado conocer lo que conocí cuando trabajé en un centro de menores tutelados. Ahí sí que hablamos de niños rotos, niños que, para el estado, no son más que un número en el expediente sin ningún tipo de esperanza. Y una de las cosas más relevantes en cuanto a educación, redención y estos aspectos, es que cuanto peor está un niño, más recursos necesita que se inviertan en él y, normalmente, menos recursos invierte el estado o la comunidad Autónoma en ellos.

Y esta es la gran tristeza de nuestra sociedad, que hay una especie de pirámide en función de tus posibilidades, y cuánto más alto estés en la pirámide más se invierte en ti, ya sea el estado, las corporaciones, las instituciones educativas y deportivas, u otras. Pero eso siempre va a hacer que quien esté más arriba se aleje cada vez más de quien esté más abajo, que solo en pocas ocasiones logrará salir de la base, y en general, vivirán una vida con poca esperanza y poco futuro. Uno de los casos más evidente es el de los sin-techo, de los que el estado hace caso omiso, y de los que se encargan algunas entidades benéficas. Pero si el estado invirtiera en abrir un centro en las ciudades de reinserción de estas personas, apoyo psicológico, donde pudieran apostar por sus cualidades, estoy seguro que la inversión multiplicaría los activos y al final daría réditos. Evalúa a una sociedad por como trata a sus mendigos.

Y es que la vida no merece ser vivida sin ningún tipo de esperanza, por eso nosotros llevamos a Cristo, la verdadera esperanza al mundo. Pero una vida de rutina vacía, sin esperanza, se asemeja bastante al camino de un muerto viviente, con los ojos vacíos, la cabeza gacha y el corazón aletargado, sin dignidad. Por eso Dios nos llama a invertir la pirámide,a gastarnos mas con las ovejas que otros ya dieron por perdidas, porque Él no ha dado a nadie por perdido, Él sigue invirtiendo. Y aunque la oveja perdida sea más sucia, que lo es, más fea, que lo es, más aburrida... Estamos llamados a limpiarla, a abrazarla y a demostrar que se equivocaban aquellos que les dijeron que no, que no valía la pena. Hoy te llamo a invertir en los de abajo, en los que nadie ha querido invertir, para que Jesús ya pueda darle la vuelta a la pirámide. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

sábado, 2 de septiembre de 2017

Balones fuera 02/09/2017

Génesis 3:12: "Y el hombre respondió: «La mujer que me diste por compañera fue quien me dio del árbol, y yo comí.»"

¿Quien no ha tenido el horror de conocer a alguien que se las pasa dando excusas todo el tiempo? En el colegio, en el equipo, en el trabajo o en la familia, yo mismo he tenido fases en mi vida en que me las pasé dando excusas para todo, y eso, a nivel psicológico es "echar balones fuera", es huir de la culpabilidad de nuestras acciones. En mi equipo había un jugador que no aceptaba las correcciones, siempre un error era cosa de los demás, cosa del árbitro o del azar, pero le era completamente imposible asumir la responsabilidad o la culpa de sus errores, con lo cual, era imposible que jamás aceptara su responsabilidad en nada, para él mismo, él era un crack incomprendido. El problema es que su actitud y sus excusas no engañaban a nadie, sólo a sí mismo, y sus mentiras desvirtuaron su autoestima, y nunca le permitieron aprender o mejorar.

Eso suele ser algo común en todos nosotros, muy pocas veces he conocido a alguien capaz de asumir la culpa y las responsabilidades, recuerdo a un hombre con el que tuve el honor de colaborar que entendió que pasar mucho tiempo resolviendo culpas y responsabilidades era un error, porque la mayoría de las personas en esa búsqueda de responsabilidades y culpas se embarran yo encuentran soluciones, así que, ante cualquier conflicto pasaba a buscar soluciones sin mirar casi las culpas. Y era por esta razón, porque el ser humano no quiere aprender, quiere no tener culpa, y esto debe contemplarse si uno no quiere verse embarrado, lo mejor es no hacer sentirse a la gente culpada. Sin embargo a largo plazo esta estrategia puede ser contraproducente, porque es muy injusta y porque la gente no aprende nada.

Yo creo que si bien el primer pecado es el del fruto prohibido, ligado firmemente a él está el pecado de la excusa, de exonerar la culpa de uno mismo y echársela a otro... Es un pecado ligado a todos los pecados, que muy pocos podemos evitar. Porque nadie quiere sentir el efecto de la culpa en sí mismo, ahora mismo estamos asistiendo de hecho a un tiempo en que después de los desastres, en vez de pensar en víctimas o en los verdaderos culpables, los dirigentes se pueden pasar meses o incluso años peleando por quedar limpios de responsabilidad y a la vez salpicar de la máxima responsabilidad a sus rivales. Pero Dios nos llama continuamente a aceptar la culpa, porque sin esa aceptación no puede haber arrepentimiento, y sin arrepentimiento no puede haber salvación. Huye de la excusa, no eches balones fuera. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

viernes, 1 de septiembre de 2017

Batallitas 01/09/2017

Hechos 4:20: "Porque nosotros no podemos dejar de hablar acerca de lo que hemos visto y oído.»”

Yo he jugado y entrenado toda mi vida en el mundo del deporte amateur, donde hay pocas recompensas materiales y muchas más necesidades que cubrir simplemente para empezar. Y hay una cosa que es uno de los grandes motores para equipos amateurs, para su motivación y continuidad en el trabajo, y son las batallitas. Si, las batallitas, esas historias que cuando llegas nuevo empiezan a contarte el primer día de cervezas, y que te hacen realmente venir a entrenar por lealtad, por amor, es lo que crea lazos entre un jugador y su club, lo que te hace quedarte o incluso volver cuando llevas tiempo retirado. Personalmente siempre quise probar en otros equipos, pero vuelvo al mío porque he vivido con ellos cosas que me hacen confiar en ellos, amarlos y respetarlos, por eso un equipo no se construye en un día ni a base de talonario por mucho que así lo crean algunos millonarios.

Esto es algo que se hace importante en todos los grupos humanos, amigos, familia, clubes... La fuerza de lo vivido se transforma en la historia y la cultura del grupo y eso une muchísimo más que los lazos de sangre. He visto a un hombre defender a un amigo que se peleó con su propio hermano en vez de defender a su hermano, porque entre ellos había una historia de batallitas de treinta años. Es tan relevante que mucha gente llama a sus amigos "la familia que elegí" aunque deberían llamarla "la familia con la que viví tan grandes cosas". Y cuando esto ocurre, delante de otros siempre surgen esas batallitas, y cuando alguien te habla de aquel amigo tuyo, tu siempre recurres a lo que tú y él hicisteis una vez, a las batallitas, porque se te llena la boca de amor y agradecimiento por esa persona. Y esto es algo que seguro todos hemos visto.

Y lo mismo debiera ser con nuestro Señor... Yo debiera hablar continuamente de la palabra de Dios, del poder de Dios para transformar vidas... Pero sobre todo, debiera hablar de mi testimonio, de mis "batallitas" con Jesús. Y a veces entablamos nuestras diatribas teológicas como si tuvieran sentido para aquellos que desconocen a Jesús. Yo no veo a los apóstoles dando el perfecto mensaje evangelístico en hechos, los veo hablando de lo que han visto y oído, relatando pura y llanamente sus testimonios personales con Cristo, y mira que sus testimonios eran poderosos. Pero los nuestros no son testimonios menos poderosos, son testimonios ricos y variados, porque son la obra de Cristo, y Él es siempre increíble en su modo de actuar. Hermanos, está bien que tengamos buenos mensajes, pero llenemos nuestra boca con las batallitas que luchamos con Jesús, que nos hicieron amarlo y respetarlo. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

miércoles, 30 de agosto de 2017

El silencio del prudente 31/08/2017

Lamentaciones 3:26: "Es bueno esperar en silencio que el Señor venga a salvarnos.”

El instituto es lugar de pandillas y enfrentamientos entre las mismas, ya sea a nivel grupal o a nivel personal de entre miembros de las mismas. Yo recuerdo haberme perdido en estos enfrentamientos mi boca, mi incapacidad, en aquel entonces, de ser discreto. Porque si mi grupo competía con otro por algún premio, ellos me provocaban y yo presumía de cómo iba a ganarles, caía completamente en la provocación, y eso les daba la información que necesitaban para ganarnos. También me pasó durante la universidad, había un grupo que trabajaba siempre junto, y yo pedía trabajar solo, y como siempre les vencía aprendieron a provocarme para que presumiera de mi estrategia y así me la robaban. Porque una buena estrategia sin discreción es una estrategia vacía e inútil, está perdida antes de luchar.

Sino que nos lo digan en el deporte, cuanto hay que medir las palabras en deporte, ya sea profesional o amateur, para guardar tus estrategias, salvaguardar cosas que te son interesantes, o simplemente no dar ventajas a nadie que no seas tú. La discreción es necesaria en la vida para evitar muchas desgracias. En los casos de separaciones y divorcios problemáticos, lo primero que un buen abogado te recomienda cuando le has contratado es cortar comunicaciones con la otra parte, no sólo ya a nivel de peleas, sino a todos los niveles, para evitar trasvase de información, que puede parecer inicua, pero no lo es. Y en estos casos puede parecer que el más bocas o el más llorón de los dos va ganando al principio, pero la estadística siempre da la razón al más discreto, es algo que el juez asocia a seriedad y además el otro ha dado demasiada información vital a sus contrincantes.

Por eso este versículo de hoy no me parece una llamada a no evangelizar, pero sí a no entrar en polémicas absurdas con aquellos que rechazan la salvación del Señor con la disconformidad posmoderna. En esos instantes en los que alguien no atiende a razones es mejor no insistir ni invadir pues probablemente cree un rechazo hacia los asuntos de Dios. Mejor estemos en silencio y esperemos la salvación de Dios, si es que esa persona va a ser llamada para el Reino. Tengo que pedirte que no quieras desvelar ni adelantarte a la estrategia de Dios para estas ovejas difíciles, que no eches a perder la sorpresa que Dios hará en su vida. Sembraste una semilla, es cierto, pero ahora es necesario que dejes que la semilla brote en silencio, apartarte, deja que sea Jesús quién riegue, y verás como en el silencio la salvación finalmente llega. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

El primero de la clase 30/08/2017

Deuteronomio 28:13: "Te pondrá Jehová por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos de Jehová tu Dios, que yo te ordeno hoy, para que los guardes y cumplas,”

Hay algo que detesto del sistema educativo actual, tal y como está diseñado, y es el modo en que hacen a los niños competir, porque hay ciertas cosas en la vida por las cuales un niño o una persona no tiene que competir, y esas cosas son las mejores de la vida. Un niño no tiene que competir por amor, amistad o simplemente saber que tiene talentos y es válido. En cambio, el carácter anticuado de la institución educativa les hace competir por un primer lugar en la clase que es exclusivo, así que, aunque vaya cambiando, siempre hay uno contento y el resto de compañeros decepcionados con ellos mismos. Además como lo que se premia en nuestro sistema educativo es memoria y trabajo, aquellos chicos con otras capacidades son continuamente ridiculizados y les hacen creer que valen menos, cuando seguramente en la calle no sea así.

Y esto continua en el sistema de estudios para conseguir cualquier puesto de trabajo o una certificación desde nivel universitario. Tanto es así que la gente no estudia ni se prepara para saber, se preparan para afrontar una prueba concreta con éxito, ya la gente no se plantea aprender cuando preparan una oposición, porque desde primaria se te ha hecho competir para estar lo más alto, no siendo el que más cualidades tiene, sino el que mejor se adapte a las pruebas. De tal modo que la gente lucha para ser el primero y no el mejor, y luchan para ser el primero haciendo lo que se supone que uno tiene que hacer para ser el primero, aunque se deje el alma y el cerebro en el intento. Y por eso vemos que la vida para muchos es una competición sin escrúpulos, para ser el primero en aparcar, en llegar, en conseguir, en comprar... Personalmente he ido contra esta corriente toda la vida porque no puedo con ese estrés.

Pero con Jesús, una vez más, todo es distinto. Dios te dice "¿Quieres ser el primero? Estupendo, entonces vas a ser el mejor, cumple mis mandamientos y yo te pondré arriba, en cabeza." En otras palabras, si me obedeces, serás el mejor y si eres el mejor, ya me encargaré yo de ponerte el primero. Para nosotros esto es un shock, estamos acostumbrados a competir de manera voraz y Jesús te dice "espera, obedéceme, haz mis mandamientos, que yo voy a competir por ti". Es tranquilizador para mí, que mi modo de vida siempre ha sido "sé el mejor aunque nadie lo valore", porque me quita estrés, es Él quién va a ocuparse de mi lugar, yo sólo tengo que obedecer sus mandamientos. Hermano, si estás actuando para ser el primero, aunque sea en tu ministerio, olvida eso, obedece sus mandamientos, deja que Él te ponga en tu lugar, y verás qué es más alto. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

martes, 29 de agosto de 2017

Gusanos en la conciencia 29/08/2017

1 Timoteo 1:19: "y mantengas la fe y la buena conciencia, que por desecharlas algunos naufragaron en cuanto a la fe,”

Es curioso como traicionamos muchas veces el sólido sistema de valores, da igual que uno sea cristiano o no, yo ya lo hacía antes de ser un ciudadano del Reino. Y un ejemplo claro es para los que somos entrenadores, especialmente en formación. Y yo tengo un sistema de valores e ítems a cumplir como entrenador de niños que traiciono cada año, no mucho, pero si lo traiciono, y suele ser siempre por la misma razón, la victoria. Lo peor es que en el tiempo en que pienso en esa decisión no puedo dormir, tengo gusanos en la conciencia que me impiden descansar, no porque nadie vaya a criticarme, ni porque nadie vaya a juzgarme, sino porque yo sé que estoy fallando a mis jugadores, fallándome a mí y fallando a Dios. Lo peor es que muchas veces que hice esto luego perdí y cuándo no lo hice, a veces gané, pero cuando me fallé y gané me sentí tan sucio...

Y eso pasa a veces en la vida también, nos pasan cosas que hacemos aún sabiendo que están mal. Yo hay veces que he cobrado dinero en negro, en mi época como estudiante y cuando me ha hecho falta, y quizás tú hayas defraudado a Hacienda o a la seguridad social. Quizás hayas engañado a un banco o para conseguir un trabajo. Y se te quedan los gusanos en la conciencia, no porque te puedan coger, porque eso sería miedo a las consecuencias, sino más bien por haber hecho algo que uno sabe que está contra sus propios principios contra su propia ética. Al final con el tiempo es algo que se olvida, pero personalmente, cuando mi integridad está puesta en juicio, siempre recuerdo este momento en que dejé que estos gusanos pudieran parte de mi conciencia, cuando no fui fiel a mis valores.

Y creo que, a tenor del versículo de hoy, esto es parte del diseño de Dios para tu mente. No creó la conciencia para que la llenáramos de valores al azar, más o menos de acuerdo con su diseño, sino que puso en nuestra conciencia una serie de parámetros de base, unos principios para que, incluso en el caso en que la palabra de Dios no nos fuera predicada, tú y yo pudiéramos deducirla. Y por eso hay una más alta de suicidio en transexuales que en personas normales, porque están viviendo en la completa contradicción al programa que Dios diseñó en sus cabezas. Y por eso hay tanta depresión en gremios que generan envidia en quien no los conoce pero que resultan un infierno como la pornografía, porque cuando los gusanos pudren nuestra conciencia, nos aleja del todo de Dios y nuestra alma queda en oscuridad, y eso es la muerte. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

domingo, 27 de agosto de 2017

El funcionario acomodado 28/08/2017

2 Reyes 12:8: "Así que los sacerdotes acordaron no aceptar más dinero de la gente y también estuvieron de acuerdo en que otros tomaran la responsabilidad de reparar el templo.”

Yo soy hijo de un funcionario, hoy tengo que hablar bien de mi padre en este aspecto porque quizás sea el único funcionario que conozco que jamás ceja en hacer su labor con la máxima excelencia de la que es capaz, a pesar de que no le vayan a pagar más ni menos por ese esfuerzo. Pero lo cierto, es que, cuando uno se acerca a la burocracia pública, al funcionariado, se encuentra con un grupo de trabajadores poco motivado, que trabaja poco y a un ritmo muy lento. Y esto es porque el cuerpo está diseñado para esforzarse en función de dos parámetros, ambición y miedo. Y hay gente que se mueve por la ambición de conseguir tener siempre más y gente que se mueve por el miedo a perder lo que tiene. Pero estos parámetros de anulan para la mayoría de funcionarios, porque no hay miedo a que les echen porque es casi imposible, ni ambición porque no van a ganar más.

Hoy vengo a ser muy crítico con el modo en que muchos se han tomado el servicio en la Iglesia y no voy a hablar de modelos, sino de como el corazón está configurado. Porque está claro que no creo que el que algunos sean apoyados por otros hermanos y sirvan a tiempo completo esté mal, pero sí creo que muchos aprovechan esta coyuntura para hacerse "funcionarios" del Reino de Dios, y tejen ese entramado de apoyos que les permiten vivir bien o se aseguran de que en sus iglesias entre el suficiente diezmo, porque de eso depende su sustento. He podido ver dos caras de esta moneda, aquellos que sirven y tienen un trabajo aparte, para mantenerse, e incluso invierten gran parte de sus ganancias en el ministerio, uno de estos amigos me dijo un día, "que no sea yo un servidor sólo si dependo de la gente, o las esclavizo a mi necesidad".

Por otro lado, de entre mucha gente que sirve con diligencia, también he visto el que vive de ese sostenimiento santo, perdonad mi celo, pero un misionero no se puede andar levantando a las once, un misionero tiene que trabajar aún más que una persona que no viva para el Reino. De tal modo que ya seas de un extremo o del otro, no deseches que Dios quiera mantenerte un día, si eres de los que trabaja para mantener un ministerio, y no deseches que Dios te haga trabajar un día para poder proveer a tu casa si vives a tiempo completo. Recuerda a Pablo, que aunque siempre estaba pidiendo generosidad para sostener a otras iglesias, trabajaba para mantenerse y pagar sus gastos y los de otros. Tal como sea, que no perdamos la ambición de traer el Reino y que nunca nos abandone él temor de no invertir nuestros talentos. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

El hijo preparado 27/08/2017

Hebreos 2:10: "Dios —para quien y por medio de quien todo fue hecho— eligió llevar a muchos hijos a la gloria. Convenía a Dios que, mediante el sufrimiento, hiciera a Jesús un líder perfecto, apto para llevarlos a la salvación.”

Hay un complejo que se llama el del hijo del entrenador, y es lo que ocurre cuando un niño es hijo de entrenador o exjugador de algún deporte, y se enfrenta a la práctica de este deporte desde niño. La exigencia puesta sobre él es mucho mayor que sobre cualquier otro niño que lo practica. Mi hermano y yo pasamos por eso ya que mi padre era jugador profesional y entrenador de baloncesto, pero nosotros no habíamos heredado su talento para jugar, y nos vimos sometidos a una presión infame por parte de algunos entrenadores. Luego lo he visto con hijos, hermanos y familiares de jugadores y entrenadores a los que se les presupone jugar mejor por su antecedente familiar, y se les presiona de una manera cruel. Cuando este chico o chica tienen el talento no pasa nada, la presión les impulsa a jugar mejor, por un exceso de preparación, pero a otros chicos, directamente les desmotiva y les hace abandonar.

Es algo parecido a lo que pasa con el hijo de un rey o un empresario muy exitoso, que desde pequeño se le prepara para heredar el reino, o el imperio económico de su padre. Por ello, recibe una formación que puede estar, o no, acorde a sus deseos y gustos, pero todo el mundo cree que él es un privilegiado por poder recibirla, sin darse cuenta que realmente es tu esclavo de su destino. No nos damos cuenta de que todo ese destino dorado no es, ni más ni menos, que la más lujosa de las jaulas, con todo lo que el dinero puede comprar, pero sin posibilidad de escapar. Pero, aquellos que sobreviven a esa presión y formación, están preparados para asumir responsabilidades y tareas que el resto de personas no estamos preparados. Por eso yo soy un firme defensor de la monarquía española, porque lo que hace el rey no hay nadie preparado para hacerlo entre el resto de españoles.

Quizás es esto lo que hace de Jesús el único capaz de asumir la tarea que Él asumió. Si vemos lo que podemos encontrar de Jesús en las Escrituras, ya sea antes del Evangelio, como después de su nacimiento, toda su vida ha sido una preparación constante para ser el Rey del universo. Y puede que algunos piensen que no son justos los privilegios que Él tiene con respecto a nosotros, pero tampoco nadie se ha parado a mirar su preparación. Y no fue una preparación mediante el placer, las comodidades y toda la cobertura, sino, como dice la palabra, una preparación mediante el sufrimiento. Cuando alguien quiera increparnos acerca de Jesús, presentándonos a ese Jesús místico y falso que la cultura nos quiere vender, hablemos de esta preparación, hablemos de este sufrimiento. Porque el Rey se preparó para reinar. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

sábado, 26 de agosto de 2017

Reciclador 26/08/2017

Filemón 1:11: "Onésimo no fue de mucha ayuda para ti en el pasado, pero ahora nos es muy útil a los dos.”

Como entrenador suele gustar el tipo de jugador que se considera perfecto. Pero este jugador no suele llegar, la verdad, ocurre muy pocas veces. Y en realidad cuando el talento llega, llega con carencias, sobre todo con carencias o físicas o de carácter que hacen que el jugador que pueda ser muy efectivo en su periodo de formación, no llegue a materializar las esperanzas que se tengan en él al pasar al deporte adulto. Y si infierno incluimos las lesiones, estos aspectos hacen que, a veces, encontremos jugadores top en categorías inferiores jugando ligas amateur o semi-profesionales, con una pena tremenda. Pero hay un tipo de entrenador que yo llamo el reciclador, que es capaz de coger un equipo en cualquier categoría, y coger este tipo de jugador sobre el que ya hay poca confianza, devolvérsela y hacer un equipo que se transforma en la sorpresa de la liga.

Y este tipo de talento es impagable, quizás este entrenador no es un entrenador campeón de ligas, o el que trae más trofeos a casa, pero consigue algo mucho más valioso, consigue revalorizar una inversión que se había perdido. Consigue que algo que se había dado por perdido con pena recupere el valor y la inversión sirva para lo que el que invirtió vio sobre ese jugador cuando aún era niño. Y eso permite que todo mejore, la competencia, lo cual aumenta la calidad, los recursos, la vida de ese jugador... Todo mejora. Pero una cosa es clara, aunque este entrenador no gane ligas, las ligas que estos jugadores recuperados ganen después de estar con él, tendrán su nombre, su sello, y el agradecimiento eterno de estos jugadores, que sabrán siempre quien fue la persona que apostó por ellos, les devolvió la confianza y les devolvió una carrera y un destino.

Y de entre los mejores recicladores si elegimos al mejor no hay nadie como Dios. Porque no es que Dios se vea forzado por las circunstancias a buscar jugadores donde no hay, no. Dios quiere escoger a los que ya, hasta los otros recicladores han rechazado, a los que todos saben que fallarán, a los lesionados, con peor carácter y con más taras que puedas encontrar, y sobre estos jugadores crea un equipo para ganar la liga. No sólo para dar la sorpresa, sino para ganar la liga de las ligas, la competición más dura y de más nivel que pueda celebrarse nunca, la competición de la historia del universo, entre las fuerzas del pecado y las fuerzas del Reino. Y nos escoge de entre los peores para que al ganar todos puedan decir, he ahí el entrenador que hace milagros, que restaura jugadores y que merece toda la victoria. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

viernes, 25 de agosto de 2017

Elegidos desde siempre 25/08/2017

1 Pedro 1:2: "Dios Padre los conocía y los eligió desde hace mucho tiempo, y su Espíritu los ha hecho santos. Como resultado, ustedes lo obedecieron y fueron limpiados por la sangre de Jesucristo. Que Dios les conceda cada vez más gracia y paz.”

En el mundo del deporte profesional vemos hoy un día un proceso que ha hecho que sea necesario regular la manera en que los clubes tratan a los niños cuando detectan el talento. Ese proceso es el de elegir a los chicos más dotados del mundo para el deporte que practican, para poder ellos educarlos y formarlos y hacer un proyecto desde la cuna. Algunos son elegidos con apenas seis o siete años y llevados a otros países, y la FIFA ha tenido que ponerse sería con estas prácticas que pueden obviar que un niño es un niño. Pero algo interesante de este hecho es el creer que el hombre pueda elegir a un niño o niña en su más tierna infancia y detectar su potencial, en base a estos fundamentos, los países comunistas basan su sistema deportivo en grandes procesos de selección de niños que no pueden elegir si jugar o no a lo que se les da bien, simplemente tienen que hacerlo.

La selección del talento desconocido es también una obsesión en otros muchos campos. Un amigo mio, agente de entrenadores, quiere encontrar el talento en entrenadores muy jóvenes y moldearlos para que le den el máximo rendimiento, en la empresa se beca a jóvenes para detectar talentos o actitudes más allá de los estudios o aptitudes. En algunas carreras, las eminencias buscan a aquel joven a quien mentorear para que continúe sus trabajos. Incluso en la Iglesia hay quien está deseando localizar a los futuros predicadores, adoradores o líderes del mañana. Todo el mundo quiere traerse a su corral al becerro que se hará semental, porque será mucho más barato, y además, la fidelidad que creas con este tipo de gente para con tu organización es enorme, siempre pongo el ejemplo de Lionel Messi, que probablemente se retirará en Barcelona dónde llegó siendo niño.

Sin embargo para nuestro Señor es algo completamente distinto. Él nos eligió, y si Espíritu, por medio del sacrificio de Jesús nos hizo Santos. No nos eligió por nosotros mismos o por nuestros dones porque eso es algo que puso luego en nosotros, para que tuviéramos el honor de ser colaboradores de su Reino. Él nos eligió no como inversión, sino por amor, por puro amor, y para poder acercarse a nosotros nos hizo santos, sino seriamos inmundos y por lo indignos de pertenecerle. Y ahora que entendimos que nos eligió y que no es de nosotros, que fue por Él, tenemos la libertad de sentirnos santos por su Espíritu, por su sacrificio y por su amor, de pagar esa inversión con amor y sólo con amor, y que si hay algún servicio, algún talento trabajando, que sea como fruto de este amor. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

miércoles, 23 de agosto de 2017

Por la constancia 24/08/2017

Eclesiastés 7:8: “Vale más terminar algo que empezarlo. Vale más la paciencia que el orgullo.”

Una de mis grandes pasiones es escribir, como puede verse en este proyecto que ya va llegando a su fin. Uno de mis grandes problemas como escritor es la constancia. Hace cuatro años era el día de mi bautizo y tenía seis obras en mente para empezar seis novelas, a día de hoy, cuatro años después siguen inacabadas, es más, dos de ellas aún no están ni empezadas. La verdad es que me resulta costoso encontrar la constancia suficiente para terminar una sola, de hecho, si lo hiciera podría intentar mercantilizarla y sacar algún rédito de mi trabajo que me permitiera hacer esto como ocupación principal, pero no lo hago, y pasan los días, los meses y los años y mi constancia me juega estas malas pasadas. Hay quien ha leído algo de lo que tengo más avanzado y le ve cierto potencial, como novela, guión o videojuego, pero ese talento sin constancia da frutos inacabados.

Y esto es algo que comparten muchos creadores, a veces las mentes empiezan muchas cosas pero carecen la capacidad de terminarlas, y esto es simplemente por un tema de falta de compromiso. Y es algo que vemos cada día en la vida, la gente no tiene constancia en sus matrimonios, con sus hijos, en el esfuerzo en sus trabajos o incluso en sus hobbies por falta de compromiso. A la gente no le importa irse de este mundo dejando un sin número de cosas inacabadas, ya sea en su familia, en sus sueños o con sus mayores talentos. Como experto en inconstancia puedo decir algo, no hay nada más frustrante como ver la montaña de tus proyectos inacabados, que para ti son tus fracasos, aquellas cosas en las que invertiste tiempo y trabajo y no conseguiste terminar, que se quedaron como un Eduardo Manostijeras personal, inacabado y triste.

Y el enemigo usa estas cosas contra nosotros, contra nuestra identidad, autoestima, contra nuestro propósito ¿Como podemos ser hijos de Dios con nuestra estadística de fracasos? ¿Como alcanzar el propósito de Dios con nosotros si nunca hemos terminado nada? Y nos paramos nosotros mismos, dejamos otro proyecto más en el cajón de los empezados, dónde una vez más refleja nuestra derrota. Pero podemos empezar una cosa sola, y aferrarnos a ella como la única cosa que podemos y debemos hacer, hasta terminarla, podemos pedirle a Dios que nos ayude, y entre los dos terminaremos con ello. Y así después de terminarla, podrás empezar la siguiente, y luego la siguiente, para así terminar todos los proyectos de nuestro cajón. Estamos a tiempo de cambiar nuestra estadística, seamos terminadores y no empezadores. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

martes, 22 de agosto de 2017

El amo 23/08/2017

Mateo 5:2: "y él comenzó a enseñarles.”

Sé que no todo el mundo pudo ir a la universidad, pero yo recuerdo un gran impacto en mi vida en esa etapa. Recuerdo mi llegada del instituto completamente verde, y durante los seis años que estuve allí me hice una clara idea de aquello. Una de las cosas que me sorprendió más era la gran variedad de profesores distintos que encontré, había chicos recién salidos de la carrera que casi tenían nuestra edad y usaban métodos que tapaban sus lagunas. Los profesores de mediana edad y mayores eran los que ponían los exámenes más difíciles, pero hacían preguntas en clase que les hacían aprender junto a nosotros. Pero entre todos había el modelo de profesor "eminencia" de edad variable, este sabía tanto que nadie osaba perder sus clases por lo que podía darte en un simple comentario, cuando pasaba se hacía el silencio, y todos decían "ese es el amo".

Y es algo que aún veo en otros campos, como entrenador a veces te cruzas con gente que es tan eminente que das gracias por poder hablar con ellos y escucharlos. De hecho, les haces las típicas dudas que por orgullo no haces a otros entrenadores por ver si te pueden aconsejar. Con ciertas personas sus conocimientos son tan amplios que uno sólo tiene ganas de sentarse a escucharles hablar y que aquello no pare nunca. Te cruzas con alguien de estos y piensas en tu interior "Este tío es el amo", es alguien de los que quizás te cruces un par de veces en la vida, pero ese día que consigues cruzarte, no quieres que se acabe, pides que continúe simplemente por poder aprender más y más de sus palabras. Además luego casi te sirve para presumir, dices, "eh, yo pude estar con este, o aquel, y pude conversar con él".

Por eso Jesús no es uno de esos maestros de los que uno quiere examinarse os con los que quiere tener una conversación. Jesús es el amo de los amos, cuando tienes la opción de conocer a Jesús tan sólo quieres sentarte a sus pies y escuchar, y si no es así... Revisa al Jesús que has conocido porque puede ser que no estés conociendo al Jesús real. Es vital que miremos a Jesús cómo el maestro que conoce todo lo que podemos querer conocer. Y quizás no tengas muchas oportunidades en la vida en la que te cruzas con Él, hay gente que tan sólo lo hace una vez en la vida, pero no puedo entender a aquellos que no son capaces de exclamar orgullosos que conocieron a un Rey, al amo de los amos, al Boss. Así que aprovecha, siéntate a sus pies, escucha y te aseguro que oirás cosas maravillosas. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

lunes, 21 de agosto de 2017

Cualquier tiempo pasado fue mejor 22/08/2017

Hageo 2:3: “¿Alguno de ustedes recuerda esta casa —este templo— con su antiguo esplendor? ¿Cómo se compara este con el otro? ¡No se parecen en nada!”

Antes de ser cristiano fui por mucho tiempo profesor y dj de salsa y otros ritmos latinos, de hecho, aún hoy en día sigo bailando a veces con algunos grupos de amigos, y me gustan mucho las alabanzas en estos ritmos. Una de las cosas que se percibe en ese ambiente es una nostalgia constante por los tiempos en los que la salsa fue un verdadero género de moda, de los cincuenta a los setenta, cuando se hicieron gran parte de las mejores canciones de salsa y chachachá que se han escrito nunca. Y un poco existe ese sentimiento, entre aquellos que profundizamos un poco más en el género, de cómo hubiera sido asistir a una fiesta en el Nueva York de los setenta, en la Habana en los cincuenta o en el San Juan de los sesenta, ese sentimiento de que jamás volverán los tiempos de oro, de añorar lo que sólo hemos visto en vídeos.

Y esto es un sentimiento que a veces he visto en las personas en distintos campos. Por ejemplo hay rockeros que sobreviven desde los sesenta porque para muchos fans, aquel tiempo fue el mejor. También hay quien cree que la era de Internet ha matado el romanticismo, y lo peor es que quizás haya que darles la razón. Porque es algo estudiado que para la mayoría de la gente por encima de los treinta cualquier tiempo pasado fue mejor, y conforme pasa el tiempo, la sociedad, los valores y el mundo en sí se degradan más y más. Ese sentimiento de nostalgia expresa que el mundo hoy está siendo un reflejo de algo mucho más hermoso que era hace unos años, quizás no tantos años, y aunque sea algo que de seguro parte de nuestra mente, es algo que nos afecta de por vida. Y ves a ancianos que piensan que ya todo es horrible y no tiene solución.

Y no se dan cuenta de que, aunque es verdad que el mundo se degrada por la acción del pecado, los que se están degradando más ligeros son ellos, no es que añoren esos tiempos sólo por como eran, sino que añoran como se sentían al ser jóvenes. Pero un cristiano esto lo sabe, sí ha leído la Biblia, no sólo este versículo sino muchos otros, hablan del antiguo esplendor del templo, y el templo hoy somos nosotros, somos templos del Espíritu Santo, y estamos en ruinas. Y claro que cualquier tiempo pasado fue mejor, el pecado lleva causando estragos cada vez mayores desde su entrada, y el hombre cada vez lo lleva consigo más y más lejos. Pero leamos las promesas de Dios, llegará un tiempo futuro en que todo será restaurado, y todo será mejor de lo que hemos vivido, pongamos nuestra esperanza en ese tiempo. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

domingo, 20 de agosto de 2017

La victoria épica 21/08/2017

Jueces 7:7: "Entonces el Señor le dijo a Gedeón: «Con estos trescientos hombres, rescataré a Israel y te daré la victoria sobre los madianitas. Envía a todos los demás a su casa».”

Supongo que todos los que hemos practicado deportes de equipo hemos tenido alguna vez esa victoria épica, que no tiene porqué ser en una final, a veces ha sido en un partido casual, la semana se da mal, hay lesionados en el banco, por alguna razón sólo pueden ir a jugar los justos... El caso es que te presentas al partido y ves al otro equipo, con todos los jugadores preparados, y te parece que te estén gastando una broma, parecen de una categoría superior. Sin embargo empieza el partido y tú te miras con los tuyos, parece que llevéis una vida juntos y puede que así sea, y quizás se junta el relajo del otro equipo con el exceso de intensidad, pero a la mitad del partido aún puedes ganarlo... Apretáis los dientes juntos, os miráis y salís a comeros lo que os echen. En ese momento parece que no llegaréis con fuerza al final, pero llegáis, y llegáis ganando lo que nadie esperaba.

En la vida estas cosas a veces pasan, el perro pequeño enfrenta al grande y le gana, a veces la gran compañía es vencida por el pequeño pueblo que la demanda por contaminar sus aguas, o el equipo de diseño joven y motivado consigue arrebatar a la gran compañía la victoria con algo desenfadado y original. Esto pasa en el día a día y la gente no se sorprende, pero yo estoy seguro de que siendo lógicos es lo más ilógico que podríamos imaginar, porque la lógica es innegable e inevitable, el pez grande se come al chico, el león a la gacela. Pero no, ocurre esto y nadie se pregunta porqué, nadie lo hace porque la televisión e Internet han matado la curiosidad humana, y la gente cree saber algo de todo pero somos ciegos ignorantes y osados, pero eso es otro tema. Es un tema peliagudo que a veces la victoria sea épica.

Pero los cristianos hemos visto la luz, una gran prueba física de que, verdaderamente un cristiano ha visto la luz, es que es capaz de ver el mundo tras ese velo y comprende lo que mueve el mundo y no da por hecho cosas que antes si daba, sino que entiende la revelación latente de Cristo en su creación. Por eso ve como Dios puede dar favor a unos pocos frente a un ejército numeroso, a un David frente a un Goliath, porque no se trata de la fuerza nuestra, sino de la capacidad de Dios de vencer con lo más nimio contra las fuerzas más inmensas de este mundo. Así es, no se trata de nuestra gloria, sino de la suya, la historia del universo es una acción inmensa y longeva para dar la gloria a Dios, pues suya es. Pero como colaborador suyo puedes participar de sus victorias, ver su favor y celebrar en su nombre. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

sábado, 19 de agosto de 2017

Col China 20/08/2017

Éxodo 34:26: "»Cuando recojas tus cosechas, lleva a la casa del Señor tu Dios lo mejor de la primera cosecha. »No cocines a un cabrito en la leche de su madre.”

Cuando yo era adolescente fue cuando se dio el boom mundial de la maleducada y soez serie americana south park. La serie de animación ahondaba en el género de la super realidad a base de muchos tacos, situaciones violentas y agresivas, pensamientos disparados y personajes sacados de contexto, pero con la intención de criticar en clave de humor la sociedad actual, en la cual los personajes se hallaban inmersos a pesar de no entenderla. En un episodio, del cual no recuerdo el argumento, el colegio organizaba una colecta de alimentos para necesitados en Navidad, y uno de los protagonistas llevaba lo único que no habían consumido en casa por años, una lata de conserva de col china. Al llegar al colegio se daban cuenta de que todos los demás niños habían llevado col china también, y uno de los personajes hacía el juego de palabras diciendo "¡Vaya colchinada!"

Esto es algo que se puede reflejar en la sociedad actual. Yo mismo he comprado una marca de arroz o de pasta para mi casa, y otra mucho más barata para la obra social o el reparto de alimentos. Porque no escatimamos en nosotros, nunca lo hemos hecho, pero para los demás bien puede valer cualquier cosa. En las recogidas del banco de alimentos se ve claro, hay quien da, y está bien, pero dan cada cosa que algunas no se entregan a los necesitados por pura vergüenza. Porque el que da, no para sentirse mejor, sino para que el que recibe se sienta mejor, ese si da lo mejor, consigue lo mejor que puede conseguir. Esa actitud si podría hacer el cambio, la de que ve un problema y no busca el modo sencillo, la caridad barata o que el gobierno se ocupe, y toma cartas directas en el asunto para liderar el cambio social.

Por eso Dios, que no deja puntada sin dar nunca, pide que a Él le ellos lo mejor, la mejor parte de nuestra cosecha. Y es que ya sea que se use o no para los más necesitados, sea que será para lo que se use, hay un punto importante en no quedarnos para nosotros con lo mejor que conseguimos, está enseñándonos a prescindir de lo que más deseamos y a desear lo mejor para Él, que es quien se supone que amamos más en este mundo. Sólo si somos capaces de desprendernos de lo mejor que conseguimos podemos decir que amamos de verdad a alguien, quién podría decir que ama a sus hijos y no es capaz de darles nunca nada mejor de lo que se quedan para sí mismos. Por eso espero que en los almacenes de Dios no se acumule la col China o los lichis, que era lo que sobraba en mi casa cuando era niño, que lo mejor sea para sus arcas, por amor a nuestro padre. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

El trabajo equivocado 19/08/2017

Efesios 5:6: "Que nadie los engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre aquellos que no lo obedecen.”

No mucha gente sabe que desde pequeño sufro un pequeño grado de déficit de atención, a grandes rasgos me cuesta bastante concentrarme y enfocarme. Por eso, nunca me enteraba de la tarea que mandaba la profesora, de hecho, siempre tenía que preguntarle a alguien, fundamentalmente mi hermano, para que me dijera que había que hacer. Aún así, a veces no tomaba bien las notas y me equivocaba en la tarea, y daba igual que quisiera decirle a la profesora que me lo habían dicho mal o que yo no me había enterado... A sus ojos, el trabajo estaba o bien hecho o mal hecho, y no había más posibilidades. Y un trabajo equivocado equivalía a un suspenso en mi clase, en mi colegio, así que, aunque a mí me pareciera injusto por mi condición, yo me llevé unos cuantos suspensos por seguir la información incorrecta.

Y es que en el colegio, o en la vida, no sirve de excusa decir que te equivocaste por recibir una información incorrecta. Si es un organismo gubernamental te hará venir otro día, si es un trabajo puede que lo pierdas, si son estudios te llevarás un suspenso... Si es una chica seguro que no te da una segunda oportunidad, porque la vida la viven aquellos que se apuntan bien la información y consiguen ejecutar bien lo que deben ejecutar. Por eso da igual si uno quiere usar como excusa que apuntó mal o no los datos para hacer algo, si siguió a alguien que le quería engañar o que estaba engañado, da todo igual. Porque cuando uno hace las cosas mal da igual si las hizo queriendo o no, el resultado es el mismo, que haya eximentes no hacen que el resultado final de nuestras acciones cambien, uno tiene que seguir afrontando la consecuencia de su error.

Por eso Dios es muy claro acerca de los falsos maestros, de aquellos que corrompen la información, porque no sólo ellos sufrirán la justicia de Dios, sino todos aquellos que sigan sus falsas doctrinas deberán afrontar las consecuencias de no seguir a Dios. Y no va a servir de excusa el decir que te criaron en la religión incorrecta, que te engañaron con los argumentos de la ciencia, nada de eso va a valer... Incluso dentro de la Iglesia no va a servir que digas que tu pastor dijo algo equivocado, porque Dios te dio entendimiento para valorar lo que escuchas y recibes a la luz de la palabra y que el Espíritu Santo te revele la verdad del Evangelio. Por eso te invito a que puedas examinar de manera crítica lo que estás creyendo o viviendo, que ayudes a otros a encontrar a Jesús, porque no habrá excusas para los que tengan el ejercicio equivocado, tenlo en cuenta. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

viernes, 18 de agosto de 2017

La que quiero 18/08/2017

Jueces 14:3: "Pero ellos le respondieron: «¿Y acaso ya no hay mujeres entre las hijas de tus parientes, ni en todo nuestro pueblo, para que vayas y tomes por mujer una filistea, hija de incircuncisos?» Y Sansón respondió: «Pidan por mí a esa mujer, porque es la que me gusta.»”

Yo nunca fui un niño caprichoso, era raro que me vieran armar un berrinche en plena calle, no era ese mi estilo. Sin embargo los niños son niños, y se dejan llevar por los impulsos mucho más que los adultos, y a veces me enfadaba con mis padres porque no me daban lo que quería, aunque me dieran lo que necesitaba o lo que me venía bien. Pero lo cierto es que si un niño tomara, hiciera y actuara como quisiera, enfermaría, se haría daño y no aprendería nada en su vida... Me recuerda a la isla de los burros de la película de Pinocho, los niños hacen lo que les gusta, lo que ellos quieren hacer, pero cuando son burros ya es tarde para volverse atrás. Es una historia fantástica, claro, pero encierra una metáfora más seria de lo que parece, porque si para un niño lo que les gusta o lo que quieren no es válido siempre... ¿Porqué iba a serlo para los adultos?

Pero los adultos confiamos en nuestro criterio para elegir las cosas, casa, empleo o pareja... Y no nos cortamos en decir "es lo que quiero" o "es la que me gusta"... Como si realmente fuera importante lo que nosotros queremos o nos gusta, como si fuera lo mejor para nosotros. Tenemos la extraña idea de que la edad nos ha dado un cierto criterio, pero al final elegimos las cosas por ser las que nos gustan, he visto a gente elegir en cosas importantes en su vida entre las que más le gusta a pesar de saber que era menos apropiado, que no tendría opciones de victoria o que directamente no le convenía. Y así somos, nos casamos con quién nos gusta, trabajamos en lo que nos gusta y vivimos en donde nos gusta, y parece algo hasta razonable, pero aún así se cometen errores garrafales con lo que más nos gusta... Y la gente te dice, al menos estás haciendo lo que te gusta, como si eso te sirviera de excusa.

Pero en la palabra de Dios, en ningún lugar está escrito que debamos vivir según lo que nos gusta... Miremos a Jonás, él no quería ir a Nínive, ni Jacob casarse con Lea... Gedeón no tenía muchas ganas de guerrear, ni Jeremías de ser profeta, seguramente si le preguntas a Oseas, nunca soñó que Dios le daría por esposa a una prostituta infiel. El propio Jesús no vivió por sus gustos sino por la voluntad de Dios, y aún nosotros supeditamos esa voluntad a en función de si nos gusta... No funciona así. Jesús se desposó y se casará con la Iglesia, que no deja de ser una esposa mediocre para ese novio, indigna completamente. Así que deja de pensar en lo que te gusta, tu pareja, tu trabajo, tu casa o tus hijos podrían no gustarte, pero seguro que la voluntad de Dios es buena para tu vida, la quieras o no. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

miércoles, 16 de agosto de 2017

El amigo a imitar 17/08/2017

Efesios 5:1: "Por tanto, imiten a Dios, como hijos amados.”

Todos tenemos esa clase de amigo o amiga que es una referencia para nuestras vidas. De estos amigos que uno casi no puede creer que sean amigos tuyos. A veces puede ser alguien genial o famoso, alguien talentoso o muy bueno, pero podríamos decir que es un amigo digno de imitar. Cuando uno tiene un amigo así, a veces puede ser frustrante, por no poderlo igualar, pero también te espolea a alcanzar una mejor versión de ti, quizás sólo puede ser su sombra, pero ya su sombra es deslumbrante. Recuerdo un equipo al que conocí al cual llegó un chico altísimo y muy bueno, y como si hubiera un pique especial, en cuestión de dos años, los chicos habían crecido anormalmente y mejorado, ninguno alcanzó al chaval nuevo, pero si que varios fueron mejores de lo que cabría esperar de ellos inicialmente. A mi me encanta poder decir que tengo un par de amigos así.

Pero normalmente no es con este tipo de amigos con quién solemos compararnos, no sólo, al menos. Decía un teólogo, que el hombre suele comparar su economía con quién está mejor que él, pero su moralidad con quién es peor, y esto se aplica claramente a nuestras vidas, porque nos interesa marcarnos objetivos para mejorar en lo económico y no en lo moral, algunos incluso ni en lo espiritual. Pero este modo de compararse nos impide ser mejores en lo que trasciende, en lo humano, en lo que en realidad marca la diferencia con otros seres humanos. Y en vez de compararnos con gente como la madre Teresa, o Luther King, nos comparamos con Cristiano Ronaldo o con cualquier millonario sin escrúpulos. Y por eso la gente no es mejor, porque nos miramos a la luz de gente que no puede hacernos mejores imitar.

Sin embargo hay una luz en nuestra vida cristiana que, además de amigo, es la mejor de las personas a las cuales podemos imitar. Jesús es un dechado de perfección al cual podemos seguir y amar, y tratar de parecernos a Él, aunque nunca podamos igualar al objeto de imitación. Pero tenemos que gastarnos intentándolo, tratando de ser como Él, a veces, imitando a gente que se parece más que nosotros a Él, pero siempre con la vista puesta en el modelo, en aquel a quien queremos parecernos. Sólo fijándonos en nuestro buen amigo podremos verdaderamente marcar la diferencia en este mundo. Como aquel que vive de imitar a otros artistas, como imitadores, no seremos más que sombras de nuestro Señor, pero... ¡Que bueno sería que el mundo se llenara de aquellos que son sombras del altísimo! Porque con su luz, todo el mundo sería iluminado de nuevo. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

martes, 15 de agosto de 2017

Religión Vs vida 16/08/2017

Malaquías 2:14: "¿Y se preguntan por qué? Pues porque el Señor ha visto que has sido desleal con la mujer de tu juventud, con tu compañera, con la que hiciste un pacto.”

Un profesor aprende mucho de los niños acerca del comportamiento humano, los niños son todos diferentes, pero se ajustan a tipologías parecidas de comportamiento. Hay un tipo de niño el cual es difícil de pillar si no lo has visto antes, y es el niño que yo llamo de perfil fariseo. Un niño de este tipo es aquel que para que no parezca que se porta mal, cumple todas las premisas delante de los profesores, pero, ya sea a través de convencer a otros, o a través de actuar cuando nadie le ve, es responsable de muchas de las malas acciones que se cometen en la clase. Pero luego, siempre en presencia de la autoridad del profesor, trata de parecer impecable, para no sólo que nadie pueda culparle, sino que además pueda culpar a otros y librarse de cualquier castigo. Son unos niños que, a veces, resultan perversos y repelentes.

Es el caso representativo del marido infiel pero obsequioso... Que trata de darle muchas compensaciones a su esposa por serle infiel, pero sin dejar de ser infiel. Así quizás él sea, para mucha gente, un marido ideal, excepcional... En algunos casos, incluso algunas mujeres o algunos hombres podrían bromear de la conveniencia del trato... Regalo por perdón, para algunos merece la pena. Pero no es así, porque que uno parezca bueno no significa que uno se esté portando bien... Es eso la típica actitud religiosa que hace unos días denominamos "sepulcros blanqueados". Y nuestra sociedad es así, está llena de aquellos que quieren vivir por obras, porque es más fácil vivir en lo que se ve, y no en la pureza de corazón, es más fácil vivir pareciendo que siendo, aparentando que conportándose.

Pero esto se convierte en un problema cuando uno tiene un Dios perfecto y que todo lo ve, un Dios que escucha a nuestro corazón como nosotros escuchamos la radio. A Dios no pueden engañarle nuestras apariencias, nuestros comportamientos de"cara a la galería", no le vale la religión, le vale nuestro corazón, nuestra vida. E inconscientemente tratamos de complacerle en lo humano, en lo puramente humano, en nuestros actos y nuestras obras, mientras nuestro corazón codicia el pecado más vil. La religión verdadera no es ir a la Iglesia, levantar las manos o cantar alabanzas, eso debe ser consecuencia, nunca el centro de nuestra espiritualidad, la religión verdadera es estar cerca del corazón de Dios, y vivir la vida que Él quiere que vivamos. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

lunes, 14 de agosto de 2017

Desde la barrera 15/08/2017

Mateo 23:30: "y dicen: “Si hubiéramos vivido en los días de nuestros padres, no hubiéramos sido sus cómplices en la muerte de los profetas.”

Como entrenador me gusta ir a ver entrenamientos y partidos de otros entrenadores, incluso de otros deportes. Se aprende mucho yendo a ver esos entrenos y partidos, observando sus tácticas, su modo de explicar, el modo en que hacen su trabajo. Pero uno de los mayores riesgos que puede correr uno cuando va a ver a otro entrenador, es el de pensar que uno lo haría mejor por ver algunos de los "fallos" -O lo que nos parece que son fallos- que nuestro compañero comete. Porque es fácil juzgar algo tomando sólo algunos detalles, pero nadie puede decirnos todo lo que está ocurriendo en un equipo más que los miembros de ese equipo. Pero en nuestro orgullo, podemos llegar a creer que con un rato que hemos visto sabemos algo de lo que ocurre en un equipo, y como hacerlo mejor.

En la vida también somos así, tenemos un componente de orgullo que nos impide ver que no lo sabemos todo, creemos que somos autosuficientes para entender, que tenemos más cualidades de las que tenemos en realidad, pero no, no las tenemos, es sólo nuestra necesidad de parecer superiores. Esto se demuestra en cualquier prueba deportiva con seguimiento de masas, la gente ve la televisión y todo el mundo lo haría mejor que el entrenador que dirige al equipo que seguimos, todo el mundo se siente más capacitado. Pero si pensamos con la cabeza fría nos daremos cuenta de que no tenemos ni idea, no estamos listos para hacerlo, y ese entrenador sabe más que nadie la situación que viven sus jugadores. Tenemos que tener en cuenta que sólo sin orgullo podremos oponernos a este modo estúpido de ser.

Y a veces somos muy así, leemos la Biblia y pensamos que seríamos mejores que los hombres que vivieron las historias ahí relatadas, que hubiéramos actuado mejor en el desierto, en la deportación, ante los ídolos o ante la muerte de Jesús. Pero lo cierto es que nunca estuvimos allí para vivirlo, nunca pudimos ver los ojos misericordiosos de Jesús cuando le negábamos tres veces, nunca fuimos conscientes del enfado de Moisés ante la falta de fe del pueblo que le seguía... Nosotros sólo vemos el toro desde la barrera, dónde todo el mundo se siente un entendido. Somos tan imperfectos y cobardes como la mayoría de los hombres de la Biblia, hubiéramos fallado y renegado como casi todos los hombres de la Biblia y necesitamos a Jesús cómo todos los hombres de la Biblia, sin estos principios de humildad no somos nadie. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

Poquito a poco 14/08/2017

Proverbios 22:6: "Enseña al niño a seguir fielmente su camino, y aunque llegue a anciano no se apartará de él."

No sé si alguna vez habéis subido una montaña en la vida, pero es una cosa que todos debieran hacer alguna vez, subir una montaña cambia tu perspectiva de la vida, te hace ver cuan pequeños somos, y lo imposible que puede parecer, desde abajo, afrontar la subida a la cima. Sin embargo, este fin de semana yo quise subir dos montañas, en Barcelona y Andorra, y me di cuenta de que si trataba de correr hacia arriba me cansaba, pero si me ponía a dar un paso tras otro y así el siguiente y el siguiente, en un rato de dar paso tras paso sin parar, llegaba a la cima. El tema es que si paras pierdes la inercia del movimiento, y si quieres volver a salir es un gasto de fuerza grande. Por lo tanto, el esfuerzo se debe dosificar poco a poco, dándole espacio y tiempo con paciencia a la subida, al final la cima será conquistada y vencida.

La educación de un niño es de ese tipo de empresas que son como la subida a una montaña. Si uno lo quiere hacer rápido y sin esfuerzo se dará cuenta de que pronto se cansará y se desmotivará, por la falta total de resultados. Si en cambio lo tomamos como una montaña y vamos paso a paso, conseguiremos pronto vencer. Todos aquellos que tenemos hijos sabemos lo difícil que resulta mantener una línea única y coherente con respeto a ellos, pero es lo único que nos permitirá avanzar, si paramos un día, coger de nuevo impulso será muy difícil, si no somos firmes resbalaremos y nos caerémos desandando el camino, hay que tener la paciencia y el valor de aguantar día tras día, tras día hasta que el niño entiende los principios y valores de la vida y es autónomo. Entonces estás arriba en la montaña.

Y esto se aplica, por tanto, a la enseñanza de la Biblia en nuestros niños, no podemos esperar que nuestros niños sean pastores o grandes adoradores el primer día de su vida, aunque haya alguna previa profecía sobre su futuro nuestro deber es educarlos para que sean grandes cristianos, buenos cristianos, buenos hijos de Dios. Y para ello debemos ver la tarea como una montaña, irla subiendo poquito a poco, pasito a pasito, sin desmoronarnos ni demorarnos, sin darnos prisa, andando para ellos y no para nuestro ego. Se ven muchos niños salir de la Iglesia por un lado discipulado, instruyamos a nuestros jóvenes y daremos vida a su vida. Paso a paso, ese es el secreto, esa es la victoria, y la Iglesia debe entender que o instruye a sus hijos, o estos abandonarán a Dios. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

domingo, 13 de agosto de 2017

Todo es mucho, por poco que sea 13/08/2017

Marcos 12:43: "Entonces Jesús llamó a sus discípulos y les dijo: «De cierto les digo que esta viuda pobre echó más que todos los que han echado en el arca,"

¿Alguna vez habéis conocido a alguien pobre? Pero no simplemente a alguien que tenga poco, sino a alguien realmente pobre, que no tenga hogar, que pase fatigas para poder vivir y dormir bajo techo. Yo alguna vez he podido hablar con indigentes y conocer de primera mano sus testimonios. Y algo que me encanta de muchos de ellos es la capacidad de dar todo lo que tienen, que es muy poco, si lo necesitas. He visto a alguno de ellos dar medio bocadillo, del que tenían, a sus mascotas, así nadie tiene hambre y todos son felices... Ese tipo de desprendimiento es digno de ser aprendido, el que vive sin nada no tiene miedo a perderlo, y por lo tanto puede compartir lo que tiene con los demás. Y la verdad es que es necesario aquel que puede dar de lo que tiene, y no solamente de lo que le sobra, porque al que le sobra, su afán no le deja pensar que le sobra.

Y en estos tiempos necesitamos más gente que dé de lo que le sobra, una de las cosas que he percibido en estos años, es que cuanto más dinero tengo más trabajo me cuesta compartirlo, pero cuanto menos tengo, más desprendido soy. Porque es que el dinero es una horrible adicción que cuanto más tenemos más queremos y cuanto menos necesitamos más agobio nos causa. Y es un tema que debemos cuidar porque es la base de todos los males, porque nos aleja de Dios, de confiar en Él, de darle toda su soberanía. Tenemos que pensar que, cuando no nos centramos en el dinero y sí en el Reino, el Señor se ocupa de todos nuestros recursos ¿Y quien va a hacer mejor lo de ocuparse de nuestros recursos, Dios o nosotros? Es una pregunta que no es necesario que contestemos.

Podemos vivir de dos modos, el modo del Reino o el modo del mundo, el modo de la santidad o el del pecado, el modo de la desconfianza o de la confianza, el modo del enemigo o el modo de Jesús. Por eso te pido que tomes el corazón de aquellos que no tienen absolutamente nada, de aquellos que pueden darte parte de lo que ese día tienen para comer y copies esa actitud en tu corazón. Porque no se trata de la cantidad que das, de cuanto das, se trata de con cuanto te quedas para ti. Y ni aún así se trata de cantidades, sino de actitudes... ¿Cuántas veces nos hemos sin nada por los demás? Dándole a Jesús el control de mi economía Él se encarga de resolverla, aunque sea sacando la moneda de la boca de un pez. Hermano, es muy desesperante vivir mirando constantemente al futuro, céntrate en lo de ahora, y vive desprendido, esa es una gran parte del verdadero evangelio. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

viernes, 11 de agosto de 2017

Señales improbables 12/07/2017

1 Reyes 18:44: "A la séptima vez, el criado dijo: «Veo que del mar se levanta una nube, pequeña como la palma de una mano.» Entonces Elías le dijo: «Corre y dile a Ajab que prepare su carro y se vaya, para que no lo ataje la tormenta.»"

Cuando era pequeño me encantaba ir al campo que tenía el padre de uno de mis amigos, un par de días o tres en semana en verano, y algún día del fin de semana durante el curso, su padre o su abuelo nos recogían a mí y a mi hermano para ir al campo dónde jugábamos, ayudábamos, explorábamos y aprendíamos. El caso es que recuerdo que el día que venía a recogernos, estábamos tan emocionados que salíamos a la puerta de mi calle y observábamos la lejanía para ver venir su coche de lejos, pero antes de verse, siempre se escuchaba, y con el tiempo aprendimos a diferenciar el sonido del coche del de otros muchos. Nos hicimos expertos en ese tipo de señales, en los días de sol nos sentábamos a la sombra y escuchábamos, si había ruido, mirábamos al horizonte para encontrarlo y lo encontrábamos.

Los agentes de bolsa más exitosos son aquellos que son capaces de ver las señales donde nadie las ve, de ver una nube del tamaño de una mano y ser capaces de entender que habrá lluvia, y comprar entonces los productos o vender para hacer dinero. Sin ese talento el vendedor de bolsa está perdido, no tiene posibilidad de éxito. Igualmente, todo aquel que es exitoso en los negocios, no simplemente superviviente, sino exitoso, lo es porque es capaz de ver aquello que nadie ve. Aquel que creó una franquicia de pizzas en un país donde nunca antes se habían comido, aquel que dijo que la rueda de la bicicleta sería mejor neumática, o la que observó que la moda de las mujeres debía ser más cómoda y funcional, se adelantaron a su tiempo, por pequeñas señales, por nubes del tamaño de una mano, y vencieron.

Y en el cristianismo existe una máxima, tenemos la señal pequeña y poco perceptible de que Jesús vendrá, de que Jesús, de hecho, ya viene. Y aquellos que vivan y se preparen para ese momento van a estar invirtiendo exitosamente en su eternidad. No quiero llamar con eso si desocuparse de los trabajos, de los estudios o de la familia, sino a añadir comentario sabiduría el empeño por nuestra eternidad. Jesús es esa pequeña nube del tamaño de una mano, pero llegará el momento en que descienda como lluvia sobre todos los hombres, y sólo los que se hayan podido preparar podrán aprovechar la lluvia, y además, la lluvia no nos llevará. Hermanos, seamos sabios, veamos las señales y seamos profundamente consecuentes... No existe otro evangelio que el que nos es dado por la palabra de Dios. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

Véngate del empollón 11/08/2017

1 Timoteo 1:15: "Esta palabra es fiel y digna de ser recibida por todos: Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero."

Los institutos de secundaria son lugares curiosos, en ellos, como ya he comentado en otros posts ocurren cosas curiosas. Por ejemplo, el odio exacerbado que la envidia genera contra el que estudia y saca buenas notas, el odio al empollón. Dentro de ese estado mental-social, muchos justifican el bullying, la persecución y otras barbaridades cuando tienen esas edades, aunque no haya justificación posible. Un año, uno de mis compañeros robó unos exámenes finales, y estando todos reunidos en torno a ellos decidimos repartirlos por entre todos los compañeros para aprobar todos, pero alguien dijo "No a los empollones, que se aguanten, ellos no los necesitan". Aquella venganza del empollón me pareció súper injusta, tanto que, cuando los profesores cogieron a los responsables yo exoneré a estos compañeros.

A veces somos así de envidiosos en la vida, y nos callamos de alguna oferta, o chollo o algo que conocemos porque pueda ser disfrutado por otros que nos rodean y a los que tenemos envidia. Pero verdaderamente es uno de los sentimientos más mezquinos que puedan tenerse como seres humanos. Pero es que además nos daña como personas, nos insensibiliza a la bondad, nos hacemos insensibles al dolor o a la necesidad ajenos, es en algún modo un daño mayor para nosotros. Dice la psicología que, en cambio, la gente más feliz del mundo es la más altruista, cuanto más altruista es alguien, más feliz es. Eso significa que nos hacemos un favor a nosotros mismos cuando les hacemos un favor a otros, especialmente cuando estos otros son desconocidos y necesitados. Es paradójico que el modo de ser más feliz sea pensando en otros.

Y de qué manera puedo ser más altruista que dando de lo que se me ha dado gratis, llevando el evangelio a toda criatura viviente. Pero podemos caer en la trampa de nuestra propia mente, podemos creer que hay quien no merece ese regalo porque ya tiene muchos, que hay quien no tiene derecho al regalo de los regalos, por muchas razones. Así pensaban algunos judíos conversos, y muchos otros en la historia bíblica, pensaban que Jesús era algo que podía limitarse, darse con cuentagotas, y eso es un error que nos afecta más a nosotros que a ellos. Porque, al fin y al cabo, Dios puede revelarse sin nuestra ayuda, pero todo aquel que no permite que alguien conozca a Cristo se opone a sus mandos y a su Reino, por mucho que se llame cristiano. Compartamos a Jesús, compartamos nuestra solución a la muerte, es lo que Dios quiere. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma

jueves, 10 de agosto de 2017

Tirar de la cuerda 10/08/2017

1 Reyes 3:26: "Entonces la madre del niño vivo, llena de compasión por su hijo, suplicó al rey: «¡Ay, Su Majestad! ¡No lo maten! ¡Que se quede esa mujer con el niño vivo!» Pero la otra dijo: «Ni para ti, ni para mí. ¡Que lo partan por la mitad!»"

Cuando yo era pequeño nos gustaba jugar a los juegos populares que se juegan a lo largo y ancho del mundo. Ante la ausencia de videojuegos, jugábamos a las canicas, al pilla-pilla, al trompo y al tejo. Uno de los juegos a los que nos gustaba jugar era el de tirar la soga, ese era un juego en que dos equipos tiraban cada uno de los lagos de una soga, siendo el primer equipo en jalar al equipo contrario para que pasaran una línea, el equipo vencedor. Y se daban partidas épicas, recuerdo un día, en que nos retamos con otros chicos para demostrar que nuestra calle era la más fuerte de todo el pueblo... Ambos equipos estaban muy parejos, tanto que no pareciera que ninguno pudiera ganar... Y la cuerda se tensó tanto que al final se rompió, y ambos equipos cayeron de culo, con una cuerda rota en las manos y sin poder seguir jugando.

Porque en toda situación de la vida en que se igualan dos fuerzas que tiran hacía lugares opuestos, lo más normal es que se rompa lo que les une... Si un matrimonio tira hacia lados opuestos, se rompe el matrimonio, si dos dueños de una empresa tiran hacía lados opuestos, rompen a la empresa. Si dos padres tiran hacía lados opuestos de sus hijos, a ellos es que van a romperlos. Porque nadie gana en ciertas situaciones, porque las fuerzas están tan igualadas que simplemente los dos lados tiran hasta que la cuerda se rompe. Recuerdo que, un poco, eso fue lo que pasó entre la madre de mi hija y yo al principio nacer ella... Durante un tiempo no hacíamos más que tirar hacia nuestro lado con la excusa de hacerlo por "el bien de la niña", pero al final la que aguantaba la tensión y podía romperse era ella... Era a su coste, a su daño, a su vida.

Pero los que aceptamos a Jesús en nuestros corazones tenemos algo distinto, tenemos amor de verdad, de ese amor que prefiere dar algo que se ama con locura a otra persona antes que dejar que se rompa o lo partan ¿Y si en los matrimonios uno de los dos dejará de tirar de la cuerda? ¿Y si pasara en la empresa? ¿O con los padres? Seguramente el otro se caería de culo, metafóricamente claro está, pero fundamentalmente, ni la empresa, el matrimonio ni el niño sufrirían las consecuencias. Y es más, la otra parte tendría que dejar de luchar, porque enfrentarse a alguien que no se defiende termina siendo bastante patético. Pero aún hay más, y es que el Juez Supremo, el y, siempre termina dando la razón al que ama, al que cede por amor... Y de Él depende toda la victoria, no se trata de quien tiene la razón, sino de en Quien hemos creído. Amad@ lector@, Dios te bendiga.

Guille Alías - Semillas del alma